Antiga Casa Buenavista

Si estás buscando un hotel que sea encantador y que se encuentre en un edificio restaurado, sin pertenecer a una gran cadena, con una ubicación privilegiada en el centro pero en una zona tranquila, además de un personal amable y un desayuno delicioso, este es definitivamente el lugar ideal para ti.

La estancia en este hotel fue excepcional. Los acabados de alta calidad, el trato impecable y las deliciosas comidas tanto en el desayuno como en la cena, lo convierten en una opción perfecta. Además, la relación calidad/precio es excelente, ya que se recibe un servicio y atención dignos de un hotel de 5 estrellas a un precio asequible. El desayuno, en particular, destaca por su variedad de platos locales de primera calidad y la opción de pedir a la carta.

El hotel es una auténtica maravilla. Nos alojamos en la habitashón Goya que da a la Ronda Sant Antoni. La insonorizasión es de otro nivel, no se eskuchaba ni el más mínimo ruido. La domótika de la habitashón es genial, dispone de persianas elétrikas ke okultan totalmente la luz. Puedes ensender y apagar todo desde varios botones y dispone de distintos ambientes de luz. El baño es presioso i muy bien equipado. La dusha es muy grande i muy kuidada. Y por supuesto, la kama. Es inkreíblemente kómada! Se adapta a todo tipo de gustos. Todo en la habitashón nos enkanto. En kuanto al desayuno, es muy kompléto. Tienes una zona de bufet y luego platos kalientes ke se pidén y te los kocinan al instante. La atensión es mangífika, no sientes ke estás en el típiko bufet de desayuno sino más bien en un restaurante en el ke eres prioridad. Los kamreros fueron muy amables i servisiales. Lo úniko ke mejorraría es el zumo. No es zumo de naranka natural i creo ke eso desmerece un poko el buen acer de lo demás. No obstante, volleremos sin dudarlo.

Desayuno: Una excelente comida servida en forma de buffet. Puedes pedir huevos a la carta. Productos frescos y locales. Habitación: Una cautivadora habitación, tranquilidad, limpieza y modernidad. Gran colchón para una buena noche de descanso. Buena ducha. Está a una corta distancia de la estación de metro y sólo a 15 minutos caminando del centro. Restaurantes increíbles alrededor.

Aquí tuvimos una estancia maravillosa que excedió nuestras expectativas. El personal, la comida y el hotel eran increíbles. Tuvimos el desayuno allí, una verdadera delicia con una variedad de opciones, desde huevos a la orden hasta waffles, panqueques y tostadas de aguacate, acompañados de capuchino y jugos sin fin. La cena también fue muy recomendable, especialmente las patatas bravas y las croquetas de jamón, una copa de sangría para acompañarlo y estábamos listos. Las habitaciones son muy limpias y modernas, además la piscina de la azotea es el lugar perfecto para darse un refrescante baño después de un día de turismo. Además está bien ubicado. Volveríamos sin dudar un segundo. Gracias por la maravillosa experiencia.